Pídele a la alegría

si te encuentras con ella

que no se cruce de brazos,

que no borre sus huellas..

que no mire a la luna

sin mirarla, sin verla

cuando doble una esquina

y allá arriba aparezca

tan hermosa, tan llena..

Pídele a tu alegría

que se bañe en su luz

blanquecina y serena..

esa luz que ilumina

el camino a mi hoguera..

 

Indefinida, pintada tan sólo con un velo

 

de palabras transportadas por el aire hasta mis huesos

 

que olvidan el sur del que venían

  

parece que llaman al amor a ver si asoma. 

 

Llega tu voz con ellas

 

templando la soledad del calendario.

 

Pero no visitas la añoranza, no das brillo a las reliquias, 

 

no despejas el rumor de la tormenta y el desamparo.

 

El río languidece, busca al mar y no lo encuentra

 

atada como viaja la alegría..

Atrapar tu brisa

en primavera era el sueño

de las flores que aún bombean

sangre en mis océanos,

y recoger hojas de otoño

para alfombrar algún día tus misterios..

Pero nadie me avisó.

La voluntad se extravía 

 

cuando busca la Esencia 

 

en mil candiles.

En la soledad de aguas sin viento

plegué las velas,

detuve el reloj de la azotea

 

cansado ya de tanta siembra

 

y tanta herida.

Fue entonces, no antes,

cuando polvo del Universo

cayó sobre la amargura.

Y allí estabas,

siempre habías estado,

en medio de la espera.

Ya no hay duda,

el amor ha izado su bandera

con alma renovada de palabras mi demencia..

y mis gestos, y mis ganas

de cruzar a nado tus entrañas.

Confiaré mi piel a tu espejo hasta abrasarme, 

como en un cuento

que imaginó en tus labios

las huellas perdidas en mis andenes 

sin armadura...

 

 

Ayer la palabra buscó refugio en tu pecho

como marinos el puerto

donde olvidaron sus amarres..

Suena el final del invierno

en las venas..

y la primavera

abrazada a tu sombra

detiene los brotes al acecho

del amor que canta entre olivares

ya llegando..

huella profunda ara

cada gesto en la piel..

y los labios abandonan el camino

de la tristeza

para pisar yerba mojada

 

desnudos,

como dos recién nacidos..

En ninguna parte mejor

que en tus brazos..

otros lugares serían

estallidos de metralla,

puños cerrados,

besos sin labios,

poemas sin dueña 

ni patria..

En ninguna otra parte

encontraré ya

 

los bolsillos tan llenos

de camino hacia adelante

 

en perspectiva..

 

                                                              

Siento como esculpes

 

tu nombre

 

en mi azotea..  

 

Estaba escrito que vendrías

a marcar sin permiso  

 

tu seña de alma gemela.

Merecieron espera y dolor

 

esas letras

que ahora trepan

en silencio por el mástil.

Al tiempo de estar solo

se le ha acabado ya la arena..