Aquí me tienes,

recogiendo cada grano

que ha soñado tu presencia

derramada en mi reloj de arena

que no marca todavía los abrazos..

aquí, tejiendo sueños invisibles

que algún día nos cubrirán

como un manto,

susurrando los poemas a la dueña

hasta encontrar su alcoba

en mi memoria..

 

 

 

Despeinan cada noche

tus palomas

las cicatrices de mi piel

decididas ya a no doler

entre las ruinas..

seca mis mejillas

tu voz sincera,

y coge de la mano

al poeta y le enmaraña..

Amor, sin darte cuenta

has fecundado con inmortalidad

la arena de mis playas..

 

 

 

 

 

 Cuando el alma convierte 

su aliento en poesía 

nada puede detenerla.

 El eterno viaje

 por mil sendas 

despliega hoy de madrugada 

unas alas en tu busca. 

Nada la detiene, 

se aventura ya por el mapa

 de la piel y el horizonte. 

Herrumbre pondrá en cuestión

nuestro pacto con la Luz ,

 vendrán al encuentro 

tormentas y meandros. 

Pero todo será inútil.. 

Nada podrá ya con la alegría..